Brazilian Coffee Company

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Cada vez más brasileños expatriados están eligiendo trabajar con cafés especiales de Brasil en los países donde viven. Es el caso de Max Lousada, Duda, que creó la startup Brazilian Coffee Company, en Viena, ciudad donde vive con su familia desde 2014.

Si no fuese por su terquedad, Max podría haber tenido una vida sin esperanzas en Brasil. Su madre era una adolescente que dio a luz y, enseguida, entregó el niño a una familia que ya tenía cinco hijas, pero que quería un niño.

A pesar de que fue bien recibido, Duda, como le gusta que lo llamen, no sentía que pertenecía a ese mundo. Cuando cumplió 15 años se fue de la casa para estudiar y trabajar.

Ciudadano del mundo

Vivió en varios lugares y se transformó en ciudadano británico después de 14 años de permanencia en Inglaterra. En Londres, trabajó en los mejores restaurantes, se graduó como sommelier – tiene 26 años de experiencia en gastronomía – y se casó con una eslovaca. En 2010, cuando el Reino Unido discutía la salida de la Unión Europea, Max con su familia, ya con tres hijos ( Liam, Mia y Tristan), decidió ir a Eslovaquia para instalar un negocio. En virtud de imposiciones del gobierno local, Duda no logró permanecer en el país y decidió probar suerte en Viena.

Poliglota, domina cinco idiomas (portugués, inglés, italiano, español, eslovaco y alemán), apenas llegó fue a trabajar al famoso hotel 5 estrellas, Sacher, también porque este abriga el restaurante Anna Sacher, uno de los mejores del país.

Premonición

Estaba feliz hasta que a fines de 2016, se enfermó, se sentía mal y cansado. Pero tuvo un sueño premonitorio. “En el sueño me sentía muy feliz y en un lugar lindo, en una plantación. Solo que, en ese momento, no logré identificar dónde era ni lo que estaba plantado”, cuenta.

Al despertar, tomó la laptop y comenzó a buscar algunos paisajes semejantes y descubrió que, en su sueño, había estado en una hacienda de café.

Le contó a su esposa Miroslava, que, ya conociendo la obstinación de su compañero, no se asustó cuando él le dijo que necesitaba venir a Brasil para conocer un poco más sobre cafés. Cuando llegó, estuvo tres semanas visitando varias estancias y se maravilló con la propiedad de Sebastião Afonso da Silva, en Cristina, MG (vea artículo….)

Emprendedor

Se enamoró tanto que volvió a Viena para pedir su despido y abrir su importadora/exportadora de cafés especiales, Brazilian Specialty Coffee.

Alquiló una oficina de 25 metros cuadrados en el centro de la ciudad (el resto del inmueble de 160 metros se divide entre la casa, tostador y tienda), consiguió un préstamo de 20 mil euros para comenzar el negocio y compró un contenedor solamente de cafés especiales para revender a diversas cafeterías y tostadores en Europa, la mayoría de ellos del Este europeo.

“En ese sentido, el conocimiento sobre la cultura de los países del este que mi mujer tiene, es fundamental para que conquistemos varios clientes por ahí. Y a ellos les gustan mucho los cafés especiales brasileños”, cuenta.

Y los planes son ambiciosos: Duda espera facturar un millón de euros, como mínimo, a fines de 2018, cuando la empresa cumpla su primer año de actividades. También en 2018 espera iniciar su negocio de tostado. Para eso, ya compró diversos equipos y, en tres años, va a montar su primera cafetería de cafés especiales en Viena. “El clima es frío y a los vienenses les encantan las cafeterías”, ya soñando con su clientela.

“Estamos trabajando para vender solamente cafés ya tostados en Austria, pues acá no se vende café verde”, dice. Y con diversos aliados brasileños, Duda ha logrado comprar microlotes por encima de 85 puntos de varios pequeños productores de las regiones de la Mantiqueira de Minas, Alto Caparaó, entre Minas y Espírito Santo y Piatã, en Bahia.

En febrero, Duda va a recibir en Austria, cafés especiales de aliados como Cleverson Daniel, de la estancia Vargem Alegre de Cristina, hacienda Alta Vista, de Robson Vilella, estancia Água Limpa, de Hélio Daniel, de Cristina, de la estancia Cachoeirinha, de Edson da Silva, también de Cristina y de la estancia São Geraldo, de Lambari, Minas Gerais.

La sede de Brazilian Coffee Company está ubicada en Richard StrauB Strasse 25, 1st floor, Liesing, Viena, Austria.

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