A punto de cumplir 88 años, Elza Soares es, antes que nada, una sobreviviente.
Dueña de una voz única, ronca, scat sing, técnica creada por Louis Armstrong, Elza comenzó a cantar con 13 años de edad. Con una ropa más grande que su talle, prestada por su madre, llegó al programa del gran Ari Barroso que, viendo aquella imagen, preguntó: “¿de qué planeta viniste, querida?” A lo que Elza respondió, sin reparos: “¡del Planeta hambre!”
Elza nunca más dejó de cantar ni de provocar: se casó con el famoso jugador de futbol brasileño, Mané Garrincha, en medio de un escándalo, donde finalmente, él dejó a la mujer para quedarse con ella. Enviudó, perdió tres hijos y siempre se reinventó, como una verdadera Fénix. En 1999, fue elegida la cantante del milenio por la BBC. Su nombre también aparece en la lista de las 100 mayores voces de la música brasileña, elaborada por la revista Rolling Stone. En la música, viene presentado un trabajo cada vez más de vanguardia. Su último trabajo, “Deus é Mulher” (Dios es mujer), de 2018 es una oda optimista a la mujer, sus alegrías y tormentos.