Realizado desde 2000, el Campeonato Mundial de Baristas solo tuvo dos ganadores latinoamericanos hasta hoy. Los demás años, los vencedores eran todos de países consumidores de café. ¿Qué hacer para cambiar esa tendencia?
El Campeonato Mundial de Baristas de 2018, realizado en Ámsterdam, fue vencido por la barista polaca, Agnieszka Rojwska, en una semifinal donde todos los participantes eran de países consumidores de cafés especiales. Ni un latinoamericano apareció en el podio. Para entender mejor esa realidad, es necesario retroceder un poco en el tiempo.
El primer Campeonato Mundial de Baristas, realizado en 2000, en Monte Carlo, tuvo solamente 14 competidores (13 europeos y uno americano) y fue vencido por un noruego. Islandia, Dinamarca, Australia, Italia y Croacia se llevaron los 2o., 3o., 4o., 5o. y 6o. lugares, respectivamente. www.wbc.com
En el Campeonato siguiente, realizado en Miami, venció el representante de Dinamarca, cuyo país ganó también en 2002, en Oslo. Por cierto, 2002 fue el año que países productores, como Brasil y la India, compitieron por primera vez. La India, inclusive, se llevó el tercer lugar. E Isabela Raposeiras, nuestra representante, terminó en 16o. Su carrera después del campeonato despegó de tal manera que se trasformó en una especie de embajadora de los cafés especiales por acá, lo que resultó en la abertura de su cafetería y escuela de barista y tostado, Coffee Lab. Lea artículo completo sobre su carrera en el link.
En 2003, el Campeonato Mundial fue realizado en Boston, EE.UU. y el australiano, Paul Basset, se llevó el trofeo para casa. México, Indonesia, Puerto Rico, Colombia compitieron por primera vez y Brasil quedó en 22o., siendo representado por Mariana Camargo.
El indignado Tim Wendelboe, de Noruega, venció el de 2004, en Trieste, Italia, y la brasileña Sílvia Magalhães, tuvo una buena colocación, el 12o. lugar. Ya los dos años siguientes, 2005 y 2006, Dinamarca abrazó los tazones.
En 2005, vale mencionarlo, nuestra barista, Priscila Da Silva Souza, superó el tiempo de presentación y fue desclasificada. En 2006, Luiz Octávio, de Lucca Café terminó en 37o.
Y en 2007, el inglés James Hoffmann conquistó el campeonato, pero fue un año muy importante para Brasil. Nuestra barista, Silvia Magalhães, quedó en sexto lugar, vale mencionarlo, la única vez que el país participó de una final del Campeonato Mundial.
En 2008, fue el turno de que Stephen Morrisen de Irlanda, se consagrase campeón. Brasil fue representado por Everton Penning Peter, que terminó en 37o.lugar.
En 2009, Gwilym Davies, de Inglaterra fue el campeón y nuestra coterránea, Yara Thais Castanho, fue clasificada en 18o. En 2010, el americano Michael Phillips fue el vencedor. Ese fue un buen año para los latinoamericanos: Brasil, México, Honduras y El Salvador compitieron en las semifinales. Yara Castanho quedó en 8o. lugar.
Los latinoamericanos, Alejandro Mendez, de El Salvador y Raúl Rodas, de Guatemala se consagraron campeones en 2011 y 2012, respectivamente. Este año, México se quedó con el segundo lugar y Colombia, Costa Rica y Guatemala lograron avanzar hasta las semifinales.
En 2013, un americano fue el vencedor, William Hernández, seguido en 2014 por el japonés Hidemori Izaki. El venerado Sasa Sestic, australiano, venció en 2015, Berg Wu, de Taiwán, venció en 2016, seguidos de Dale Harry, de Inglaterra, en 2017 y la polaca Agnieszka Rojwska en 2018.
Qué ocurrió con los latinoamericanos
Diferente de los latinoamericanos que simplemente no logran pasar a las semifinales desde 2015, otros países productores de cafés especiales como Malasia, Indonesia, Tailandia y Kenia han conseguido buenos resultados.
Pero vamos a volver a lo que interesa: ¿por qué los baristas latinoamericanos y, en especial, los brasileños, no obtienen buenas colocaciones en los Campeonatos Mundiales?
Señalar solo la falta de incentivos de la cadena de los cafés especiales brasileños no es suficiente. Es verdad que las razones de tan terrible desempeño por años seguidos son varias. Pero, ¿qué se puede hacer para cambiar ese panorama?
El primer punto es el promedio salarial de un barista en Brasil, que no supera mucho los R$ 1.343,00 por mes. El salario puede variar de R$ 684,00 a R$ 6.054,00 (trabajo de barista en un buque internacional). Esta estimación salarial se basa en 123 salarios publicados por empleados en la página www.lovemondays.com.br, que forma parte de www.glassdoor.com, el sitio de empleos y reclutamiento más transparente del mundo.
Con un salario tan bajo (pero que corresponde a la realidad del país, lamentablemente), es casi imposible pagar viajes del propio bolsillo, comprar libros, hacer cursos y además pagar las cuentas. Sin el apoyo de empresas privadas, empleadores y otras alianzas, es muy difícil hacerle frente a los extranjeros.
El entrenador de baristas salvadoreño, Federico Bolaños, tiene una opinión formada: “ El mundo de los cafés especiales está en constante evolución. Lo que funcionó en 2017, no va a funcionar más en 2018, mucho menos el año que viene. Los baristas sudamericanos, de manera general, no evolucionaron al mismo ritmo que los de los demás países. Es necesario encarar la profesión con mucha seriedad, leer mucho, estudiar, investigar y probar mucho café. No se trata de seguir tendencias, ¡sino de crearlas! Basta de copiar lo que están haciendo los otros, es necesario proponer ideas que revolucionen el mercado y mejoren el café”, explica el entrenador. www.soybarista.com
Otro punto es que, actualmente, la elite de los baristas internacionales compite con los cafés Gueisha, de Panamá. Son carísimos, muchas veces inviabilizando el acceso de nuestros profesionales al producto.
Un campeón internacional nunca venció compitiendo con un café especial de Brasil. Como parte de los competidores internacionales visitarán el país con más asiduidad este año, por los campeonatos que habrá aquí, es muy posible que cambie ese panorama. “Los eventos internacionales servirán de vitrina para el café especial brasileño y pueden estimular negocios en el futuro, ya que los baristas van necesariamente a profundizar sus conocimientos sobre los granos especiales brasileños y llevarán esas informaciones a sus países”, comenta la directora de BSCA, Vanúsia Nogueira.
También ayuda mucho leer libros sobre el asunto, mejorar haciendo cursos reconocidos, acompañar los trabajos y las presentaciones en internet de baristas renombrados y, recordar que, antes que nada, la base de la profesión es la de “servir”.
En el último campeonato brasileño de la clase, realizado a inicios del año en Rio de Janeiro, vencido por Thiago Sabino, Grão Especial tuvo la oportunidad de entrevistar a los jueces internacionales, entre ellos Luke Adams, que fue categórico: “es necesario tener humildad todo el tiempo. No olvidar que la función del barista también es la de limpiar sus equipos todo el tiempo durante la presentacion, principalmente en un campeonato mundial. El final de una presentacion debe ser igual al final del día en una cafetería: se necesita limpiar absolutamente todas las superficies, el moledor, la máquina etc. Lea el artículo completo y vea el vídeo de la entrevista en el link.
Al ser entrevistados, los jurados insistieron en resaltar la postura de Dale Harry, inglés, campeón mundial en Seúl, Corea, en 2017. “Dale es un obstinado por su trabajo, lava miles de tazas por día. Y, para él, ese tipo de actividad no lo disminuye como profesional, por el contrario”, afirmaron.
En relación al conocimiento sobre la producción de cafés especiales, el brasileño, naturalmente, lleva una ventaja por ser uno de los pocos países donde se tienen las dos puntas: el consumo y la producción. Es verdad que el consumidor brasileño todavía no es tan sofisticado como el europeo, por ejemplo, pero es solo una cuestión de tiempo. Ahora, aprovechar todas las oportunidades para aprender inloco, en la estancia, a pocos kilómetros de casa, es una cuestión de empeño.
El papel de las asociaciones
Recientemente la Asociación Brasileña de Cafés Especiales (BSCA) y la Agencia Brasileña de Promoción de Exportaciones e Inversiones (Apex-Brasil), firmaron la renovación por dos años del programa “Brazil. The Coffee Nation”, por un valor total de R$ 14 millones, con vigencia hasta mayo de 2020.
Además de una serie de iniciativas, principalmente en el mercado asiático, parte del dinero del programa será invertido en la relación con los baristas. La presidente de la BSCA, Carmem Lucia Chaves de Brito, resalta que, por primera vez en la historia, Brasil será palco de las principales competencias internacionales de barismo, del 7 al 9 de noviembre, dentro de la Semana Internacional del Café (SIC) en Belo Horizonte, cuando el país será sede de cuatro modalidades, con centenas de competidores de aproximadamente 50 países.
“Con relación a nuestro pobre desempeño en los Campeonatos Mundiales, es necesario, antes que nada, reconocer donde estamos, tener humildad. Sólo así podemos transformar ese panorama”, comenta Carmem.
La idea de BSCA es la de esparcir al máximo posible la realización de campeonatos en las diversas regiones del país. “Donde tengamos gente de la cadena del café especial interesada en promover esos eventos, BSCA estará ahí como aliada”, comenta Carmen.
Cambio de mentalidad
“Estamos acompañando los campeonatos que están ocurriendo en Brasil y percibimos nítidamente una evolución del trabajo de esos profesionales. Estamos saliendo de una generación de baristas muy vanidosos para una nueva generación mucho más empeñada en hacer de la actividad una profesión para toda la vida. Estoy segura que veremos baristas brasileños en una semifinal en los próximos cinco años”, enfatiza.
Para fines de 2018 la BSCA promoverá cerca de 10 campeonatos regionales y ese número puede crecer un 20 % el próximo año. “Estamos sensibles a esa necesidad del proprio mercado”, admite.
El entrenador de baristas brasileño, Éder Hilario, con 10 años en el mercado, responsable por el entrenamiento de profesionales de grandes cafeterías, es de la opinión que, después que la BSCA asumió la coordinación de los campeonatos, cerca de dos años atrás, hubo un cambio significativo. “Todavía estamos atrasados, principalmente porque nuestro público consumidor de cafés no es tan exigente como el europeo o el asiático”, dice. La información es otro punto: “allá afuera, los baristas están congelando la molienda de los granos con nitrógeno para obtener una mejor homogenización, es esa es una técnica que no llegó acá todavía”, finaliza Hilario.