Nuevas opciones ayudan el crecimiento de la marca en Brasil, a pesar de la pandemia y del empobrecimiento de la población
Tea Shop, marca que nació en España tres décadas atrás y está en Brasil hace solo 10 años, está lanzando nuevos modelos de franquicias para ampliar su presencia en el país. Presente en 16 estados y en más de 40 operaciones, la marca actuaba solamente por medio de tiendas o kioscos de centro comercial. Con la pandemia y la crisis económica, el CEO de Tea Shop en Brasil, Michel Bitencourt, responsable de traer la marca para Brasil, decidió enfrentar las malas noticias con audacia y pensamiento fuera de la caja: “creamos el kiosco de seis a nueve metros cuadrados, Tea Express (carrito para centros comerciales), Córner Tea Shop y Tea Moments, opciones que van de R$ 10 mil a R$ 500 mil de inversión”, explica el emprendedor.
“El resultado es que durante los dos años de la pandemia no lanzamos ninguna tienda. Y más: con una inversión también en nuestro sitio web, nuestra facturación aumentó 13%”, cuenta Michel.
La franquicia de una tienda convencional de Tea Shop puede costar hasta R$ 500 mil, valor que pocos brasileños tienen a su disposición en un momento de ventas bajas en el mercado minorista. Es ahí que apostar en modelos más baratos se mostró un éxito. “La calidad de los productos continúa igual, incluso mejor. Pero ahora es posible con una inversión a partir de R$ 20 mil que un franqueado monte un córner Tea Shop dentro de un establecimiento ya existente, como, por ejemplo, una tienda de ropas, llevando a un público amante de té para el local. “Eso es muy interesante, dado que el cambio en el comportamiento del consumo de tés en Brasil de 15 años para acá aumentó considerablemente por una serie de factores”, expresó Bitencourt.
“De esta forma, driblamos la cuestión del empobrecimiento de la población brasileña durante la pandemia. Excepto los políticos y los funcionarios públicos, cuyos rendimientos no fueron afectados, los demás brasileños, empleados de empresas privadas, autónomos, eso sin hablar en quien perdió sus rentas, hicieron que las ventas de todos los bienes disminuyesen. Pero, al frente de una operación como Tea Shop, en el papel de gestor, no podemos parar. Nuestro papel es enfrentar la situación, por más adversa que sea y trabajar para buscar soluciones”, explica.
“Ya teníamos algunos proyectos diseñados, pero la pandemia solo aceleró el proceso, lo que hizo que pusiésemos en funcionamiento más rápidamente los nuevos modelos. Además de esto, las personas están más preocupadas con la salud y el té, que, aunque no es medicina, puede auxiliar en el mantenimiento de una buena salud. Y el brasileño está aprendiendo que beber té es bueno por sí solo, no debe tener función ninguna, él puede beber solo por el placer”, explica.
Otros formatos
Una tienda de centro comercial de Tea Shop cuesta como promedio R$ 500 mil. Un kiosco de 12 metros cuadrados, cerca de R$ 250 mil, ya que son creados con materiales caros, robustos como madera de alta calidad, mármol y vidrio. Para diversificar, crearon los kioscos de seis a nueve metros, y Tea Moments, modelo en que el asociado se convierte en un representante de Tea Shop en su región, con aporte en el negocio a partir de R$ 10 mil. “Es una manera muy inteligente que encontramos para crecer en ciudades menores en el interior de Brasil y funcionó, porque la persona puede tener una renta extra, así como revender nuestros productos para cafeterías, panaderías, emporios y restaurantes de la región”, esclarece.
“El consumo de té en Brasil no es solo por necesidad o beneficio para la salud. Ahora, los tea lovers pasaron a consumir por placer. Las puertas del consumo se amplían mucho. Té caliente, frío, smothies, ingredientes para la culinaria, harmonizaciones, línea de cosméticos, el té está en todos los momentos del día”, recuerda el ejecutivo.
La guerra
La piedra en el zapato del crecimiento continuo de Tea Shop, y que está quitándole el sueño a mucha gente, es el prolongamiento del conflicto entre Rusia y Ucrania. “Normalmente, en el mercado minorista, el desempeño de las ventas en el segundo semestre es siempre mejor, gracias al Black Friday, Navidad y el Decimotercero. Sin embargo, este año, estamos un poco temerosos porque tendremos elección en Brasil, Mundial de Fútbol y el recrudecimiento de las tensiones geopolíticas, principalmente entre China y los EE.UU. Si no fuese eso, me arriesgaría a decir que batiríamos nuevamente nuestras metas. Pero prefiero ser realista y tratar de forma competente con las demandas”, finaliza Bitencourt.
Tea Shop en Brasil
Son más de 40 tiendas en 16 estados – San Pablo, Río de Janeiro, Brasilia, Belo Horizonte, Porto Alegre, Curitiba, Salvador, Fortaleza, Recife, Goiânia, Cuiabá, Vitória, Florianópolis, Maceió, João Pessoa, Santos, Gramado, Balneario Camboriú, Niterói, Vila Velha, Londrina, Caxias do Sul y Canoas.
Tea Shop en el Mundo – Más de 100 tiendas en cinco países: Italia, Portugal, Argentina, España y Brasil. (lea un artículo aquí sobre la creación de Tea Shop: colocar enlace para la entrevista con el CEO de Tea Shop)
